Capítulo 9 2/3. Alai.

  No puedo superar el hecho de haber besado a Harry. Simplemente no puedo. No quiero admitirlo, me muero por verle, pero tengo miedo. Por lo que sé, no me soporta. Espero que el beso le haya hecho cambiar de opinión sobre mí. Dios, necesito verle ya. Blair está contando algo de no sé qué paranoias suyas con el comportamiento de Zayn. Bueno, puede que eso me haga dejar de pensar en rizos y labios carnosos.

-No sé, Nora. Creo que todo es una mentira, ¿sabes? Zayn es increíblemente tímido y fíjate cómo estuvo conmigo. No quiero alejarme de él, me gustaría que todo fuera como ayer, todos los días, en cada momento.   Pero simplemente -suspira y cierra los ojos con cansancio-, no sé.

 Es una de esas tardes que pasamos solas las tres, viendo Pretty little liars sin parar y comiendo helado directamente del tarro. Uno de esos tarros enormes de helado Häagen Dazs de avellana, el preferido de Blair.   Aunque yo hubiera preferido algo más exótico, aunque el sabor dulzón de la avellana acompaña perfectamente a mi serie favorita. Blair, como decía, lleva toda la tarde llorando y Nora le acompaña desde más o menos la mitad. La televisión sigue encendida como telón de fondo. Ambas están en la misma situación con Liam y Zayn y no puedo evitar sentirme culpable por creerme que mis problemas llegan a la altura de los suyos. A cambio, les traigo más helado y pañuelos cada vez que lo necesitan. 

 Cuando el sol ya está desapareciendo de la playa, llaman a la puerta y se nos unen Niall y Hannah.

-No contestabais los teléfonos y todos -Hannah recalca la última palabra- en casa nos habíamos empezado a preocupar.

 Niall ya tiene a Blair sentada entre sus piernas y la abraza con fuerza, dándole besos en la frente y las mejillas. Hannah entra como si estuviera en su casa, se sienta con mi hermana y la abraza hasta que se apoya en su hombro, me siento a su lado y me apoyo yo también. Empieza a sonar I'm yours de Jason Mraz, la canción de Hannah y Lou.

-¿Sí? ¿Cariño? Sí, están bien. No, no ha pasado nada, Sí, segurísima, ¡dile a Zayn que deje de gritarme! No, ¡eh, no! Hola Harry. Síi, de verdad, no os mentiría. ¿Me pasas a mi novio otra vez? ¡Harry! ¿Louis? No, cariño. Vale. Yo también, Boo Bear.

 Cuelga y pone los ojos en blanco, se oye una carcajada limpia de Niall.

-Todos ellos acabarán conmigo, de verdad.

-¿Seguía Harry tan nervioso? -mi corazón se desboca. Lo noto en la garganta y en las entrañas.

-Liam ha conseguido calmarle, ya sabes.

 Cuando todo el ambiente se relaja, tras haber conseguido hacerme llorar, Hannah hace la pregunta que lleva flotando en el ambiente.

-Bueno, ¿puede saberse a qué ha venido todo esto?

-Zayn no me quiere.

-Creo que me gusta, y mucho, Liam.

-Besé a Harry.

 Niall me mira al instante. Nunca he hablado con él y acabo de confesar algo que tiene mucho que ver con uno de sus mejores amigos, me pongo roja y evito mirar sus increíbles ojos azules.

-Yo ya lo sabía -mira a Hannah, que se encoge de hombros.

-Yo también.

-¡¿QUÉ?!

 Hannah me mira con cariño, para tranquilizarme.

-No te preocupes, cielo, no se ha quejado. Y sí, lo ha contado todo.

-Entre todos nos contamos siempre todo -explica Niall-. Es decir, vivimos juntos y nos conocemos como hermanos. Es más fácil si nos contamos todo desde el principio, nos podemos ayudar más y eso.

 Veo a Blair sonreír con lo que Niall dice mientras Hannah aprovecha y se sienta a mi lado.

-Verás, Harry es muy descarado, muy de tontear. En eso es como Louis -sonríe-. Y a pesar de que, bueno, ya sabes que no eras su persona favorita, desde que le besaste, no hace más que hablar de ello y le tienes muy intrigado.

-Y bastante emocionado -añade Niall.

 Me quedo muda. Mi estómago acaba de dar una vuelta de campana y aún así creo que no he entendido lo que me dicen. Miro la alfombra de color pálido y me entra una risa floja llena de furstración, nerviosismo y felicidad todo al mismo tiempo. Todos se ríen de mí.

-En cuanto a Zayn y Liam... -Niall y Hannah ponen los ojos en blanco a la vez y se ríen.

 Suena el teléfono de Blair, todos volvemos la vista hacia la mesa y Niall acerca la mano para cogerlo, mira la pantalla y se ríe. Descuelga.

-¡Hola guaaaaapo! Sí, claro que soy Blair. Oh, me has pillado. Sí, bien. Avisa de que el primero que se comporte mal recibirá una patada mía en el trasero y dormirá en la calle. Vale. Os esperamos.

 Todas le miramos pidiéndole una explicación.

-Van a venir, traen comida.

 Mierda, mierda, mierda, mierda, mierda y más mierda. Harry va a venir a casa, a traerme la cena. Y yo en pijama. Empiezo a sentir un inevitable deseo de agradarle, tengo que caerle bien, impresionarle. Sí, que me mire y se quede flipado. Pero vive a media calle de aquí, y la comida se pide por teléfono. Empiezo a subir las escaleras cuando suena el timbre de la puerta. Blair me mira con desesperación desde el sofá y con un suspiro, voy a sentarme a su lado para que me apriete la mano cada vez que se estrese.

 Esto de la cena no ha sido una buena idea. Nora, Blair, Hannah, Niall y yo estamos sentados el sofá comiendo alitas de pollo con salsa barbacoa y los chicos están en el suelo, sobre un improvisado mantel y comiendo tacos. Liam y Zayn se hablan al oído en susurros, Harry está sentado al lado de Louis y ambos se ríen mientras ven la televisión italiana a pesar de tener sintonizados los canales británicos. La tensión se nota en el ambiente.  

 Blair ha huido de Zayn desde que ha llegado (utilizándome a mí, claramente) y él actúa como si no la hubiera visto. Nora se distrae dándome conversación mientras Liam se comporta como hace dos días: como si nada.

Intento no prestar atención a Harry pero no puedo evitar fijarme en que tiene los rizos mojados, como si acabara de ducharse y un escalofrío me recorre. También me doy cuenta de que no me ha mirado desde que ha llegado.  Eso sí, del abrazo de Nora no se ha olvidado, y eso me fastidia aún más. Tenerle celos a mi hermana mayor es exactamente lo que me faltaba. Pero no puedo evitarlo, ¿por qué ni siquiera un "hola"? 

 No nos damos cuenta hasta que la televisión tiene interferencias de que afuera está lloviendo y ya caen rayos y truenos allá a lo lejos. Noto que Blair se encoge en el sofá: no le gustan las tormentas eléctricas fuera de SU casa. También noto la irritación de Nora mientras mira al cielo. La noche ya está bien entrada y apenas hay luz en la calle. Me tenso, los rayos caen cada vez más cerca y los truenos son cada vez más sonoros.

-¿Es posible que se vaya la luz, Nora?

-No creo, Zayn. Sólo vengo aquí en verano, pero nunca se ha ido -Nora nos transmite a todos la preocupación de su voz.

 Un enorme estruendo que hace temblar las paredes y un destello que nos ciega por un instante se llevan toda la esperanza que nos quedaba y la luz de toda la casa. Blair ahoga un grito, Hannah se acurruca contra Louis y Nora y yo soltamos una palabrota a la vez. Mi hermana empieza el plan de ataque, se levanta de un salto.

-Alai, ve con cuidado al estudio y coge linternas, mantas, almohadas y velas. Los demás, ni se os ocurra moveros, voy a ver si consigo hacer que funcionen los plomos. Esta noche la pasáis aquí, todos.

-Te acompaño, Nora -dice Liam levantándose.

 Hago caso, y rodeando el sofá inicio el camino despacio hasta el estudio. Mis ojos se empiezan a acostumbrar a la oscuridad cuando ya he dejado el salón atrás.

 A penas utilizamos el estudio, por lo que no sé dónde está nada. Abro la puerta y mi mano se dirige al interruptor. Muy lista. Avanzo unos pasos con cuidado hacia la oscuridad sin esperar a que mis ojos se acostumbren. Noto algo detrás de mí. Tranquila Alai, sólo estás histérica. Oigo la puerta cerrarse con un ligero "click". El corazón se me acelera y me sudan las manos. El negro de la habitación es demasiado denso y no distingo nada. Doy un paso hacia atrás para alcanzar la pared y la puerta. Me choco con algo o, mejor dicho, con alguien y me tenso. Parece que ha estado conteniendo la respiración hasta que le toco porque en cuanto lo hago caigo en lo fuerte que respira. Me tenso más aún. Si me doy la vuelta y echo a correr, la puerta no puede quedar tan lejos. Me giro con rapidez y mi acompañante da un pequeño paso hacia atrás antes de reaccionar y agarrarme de la cintura para evitar que corra. Intento defenderme, pero tiene más fuerza que yo. Dirigiéndome, me hace apoyar la espalda en la pared y junta nuestros cuerpos. Con mis muñecas agarradas, pone las manos una a cada lado de mi cabeza y se agacha a mi altura, a la de mi cuello más bien.

-Lo has estropeado -susurra con voz grave mientras mis ojos se van acostumbrando en la oscuridad a la silueta de sus rizos-, yo también quería pillarte desprevenida.

-Voy a matarte Sty... -antes de dejarme terminar, pega su boca a mi cuello y sonríe, rozando mi piel de gallina con sus dientes. Me recorre un escalofrío y no consigo terminar la frase. Levanta la cabeza a la altura de la mía, una cabeza y media por debajo de su estatura normal, y le intuyo sonreír.

-Tu hermana dice mucho eso. Sobre todo cuando le cuento los planes que tengo para ti.

 Abro los ojos de pura sorpresa y mi cuerpo se relaja por fin. Harry aprovecha y apoya su boca en la mía en un solo movimiento, simple pero efectivo.

 Nuestros labios se mueven a la vez a la par que sus manos conducen a las mías hasta su cuello. Enredo los dedos entre sus rizos mientras él apoya sus manos en la parte baja de mi espalda y me aprieta contra su cuerpo. Tanto que duele. Respiramos a la vez. Abre la boca y su aliento roza mi lengua. Suelto un suspiro y Harry introduce una mano tibia por dentro de mi camiseta, con la que destempla mi cuerpo, mientras la otra me mantiene pegada a él. Le beso con tantas ganas de el que me pregunto como he sobrevivido hasta ahora.